Cada cierto tiempo, surgen en Guatemala, algunas manifestaciones y/o movimientos guanabis, que pretenden limpiar la conciencia de los participantes, generalmente son bastante bien organizadas, que tienen una gran infraestructura atrás y que da la apariencia de ser altruista, totalmente desinteresada y cuyo objetivo principal, siempre es muy noble.
Precisamente lo de noble y limpieza de conciencia, son los ganchos que atrapan a los ingenuos o no, a participar de esta actividad. Los guanabi o wannabe en inglés que deriva de want to be, están siempre a la moda de las actividades sin sentido e inútiles que suceden en el país, que copian modas e ideas extranjeras y las adoptan como propias, a tal punto, en que llegan a creer que realmente les pertenece y fueron ellos los creadores.
A propósito, si creo en el intercambio cultural, respetando los límites y orígenes de los mismos.
La actividad guanabi del mes, es la «Cadena humana contra la violencia». Y el escenario será el volcán de agua, que como es de esperarse, se presta para un lema pegajoso: «subida por la vida».
La pregunta entre tantas es: esta cadena humana, aparte de limpiar la conciencia de los participantes, ¿logra algún cambio?, ¿propone alguna solución?, ¿es el primer paso de algo?, la respuesta común es no, como es de esperarse.
Sin embargo, para sus participantes, queda la satisfacción, de estar haciendo algo y también les da tema de conversación para los siguientes días, contando sus aventuras, además de tener algo interesante y cool para poner en sus perfiles de Facebook y cuentas de Twitter, algo que despierte la admiración de sus pares y los haga sentir que pertenecen a algo.
Quizá sea este sentido de pertenencia, lo mas explotado por las actividades guanabis, como la Teletón y el Mc día feliz, donde la gente ya no participa por la noble causa que se supone representan, sino porque con eso creen que pertenecen a algo.