Caminar sin detenerse
Cuando Sócrates estaba en la cárcel, le pidió a un prisionero que cantaba que le enseñara una canción. – «¿Para qué?» -le preguntó el otro. – «Para que pueda morir sabiendo una cosa más» -respondió el filósofo. Amigos y hermanos, que la paz de Dios reine en sus vidas. Dicen que sin importar la edad … Leer más