¿Das gracias a Dios por los alimentos?

Una pequeña historia nos habla de un niño que un día fue invitado a cenar en casa de un amiguito. Cuando el pequeño se sentó a la mesa, inclinó la cabeza y esperó que alguien diese gracias por los alimentos. Sin embargo, las demás personas que estaban a la mesa comenzaron a servirse la comida.…Continue reading ¿Das gracias a Dios por los alimentos?

Señor, hoy he buscado Tu Rostro

En una ocasión un joven tuvo el deseo de subir a la cumbre de una montaña pues pensaba que ahí podría ver el rostro del Señor. Preparó todo lo necesario, y un día al amanecer empezó su gran aventura; al llegar a las faldas de la inmensa montaña se topó con un anciano que vivía…Continue reading Señor, hoy he buscado Tu Rostro

Volver a Galilea sin miedo

El Evangelio de la resurrección de Jesucristo comienza con el ir de las mujeres hacia el sepulcro, temprano en la mañana del día después del sábado. Se dirigen a la tumba, para honrar el cuerpo del Señor, pero la encuentran abierta y vacía. Un ángel poderoso les dice: «Vosotras no tengáis miedo» (Mt 28,5), y…Continue reading Volver a Galilea sin miedo

Un pensamiento atinado

Gene Marine, editor del Bellefontaine Examiner envió una vez a un joven reportero de deportes a cubrir un importante juego, pero cuando el joven regresó, no traía la historia. Marine le preguntó por qué y el reportero le contestó: – No hubo juego. – ¿Qué? ¿No hubo juego? ¿Qué ocurrió? – El estadio se vino…Continue reading Un pensamiento atinado

¿Para qué usas tus ojos?

En la tarde de la víspera de Pentecostés, muchos jóvenes habían ido a la sacristía con la intención de confesarse con Don Bosco. Una señora de bastante edad bajaba llevando de la mano a una niñita de diez o doce años, con los ojos vendados. Se llamaba María Stardero, y venía de Vinovo con la…Continue reading ¿Para qué usas tus ojos?