El asiento vacío
El asiento vacío habla con elocuencia. A pesar de que su mensaje no es agradable, todos lo pueden oír. Al predicador el asiento vacío le dice: «Tu sermón no vale.» Al que visita la iglesia, le advierte: «Ya ves, vamos perdiendo terreno.» Al nuevo que busca una iglesia donde asistir: «Vale más esperar a ver … Leer más