¡Bota la basura!

Basta un solo día sin sacar la basura para que al poco tiempo comencemos a experimentar las desagradables consecuencias de nuestro olvido. Toda clase de insectos y plagas se sentirán atraídos por el infaltable mal olor provocado por la basura ya en estado de descomposición.

Del mismo modo nuestro corazón que es la casa de Dios, donde habita el Espíritu Santo se puede llenar de basura, y hasta podemos estar con una terrible apariencia y mal olor, sin siquiera darnos cuenta.

«Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados.» Hebreos 12:14-15

La amargura, el odio y el resentimiento son la basura que frecuentemente contamina el alma. No podemos olvidar algún hecho que nos ha sucedido y lamentablemente como está pasado, ya está trascendiendo. Esto no sólo nos contamina a nosotros mismos sino que también a los que nos rodean, quienes seguramente nos ven que actuamos de manera diferente.

Cuando tengamos una bolsa de basura, lo mejor que podemos hacer es botarla inmediatamente donde corresponde. Así como sería ilógico empeñarnos en guardar la basura en nuestra casa, de igual manera nos equivocamos al guardar dentro de nuestro corazón esos comentarios, chismes, mentiras o palabras que nos hicieron daño y las repetimos una y otra vez en nuestra mente. Les damos mucha importancia cuando son sólo una bolsa de basura que está ensuciando nuestra alma.

Dios te pide que sigas la paz y la santidad puesto que esta basura es un estorbo para ti. La «Paz», para que arregles los problemas que pudieras tener en tus relaciones interpersonales, y la «Santidad», para que puedas limpiar tu casa. Recuerda que solamente viviendo en santidad veremos al Señor.

Es tiempo de limpiar tu casa, no te quedes con la basura que sigue contaminando tu vida, Dios quiere darte una vida abundante, para ser libre de las ataduras del pasado, el odio y la amargura.

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