Haz de mí un instrumento de Tu paz

Señor,
Haz de mí un instrumento de Tu paz…

Allí donde haya odio, ponga yo amor;
donde haya discordia, ponga yo unión;
donde haya ofensa, ponga yo perdón;
donde haya duda, ponga yo fe;
donde haya error, ponga yo verdad;
donde haya desesperación, ponga yo esperanza;
donde haya tinieblas, ponga yo luz;
donde haya tristeza, ponga yo alegría…

¡Oh Maestro!
Que no me empeñe tanto:
en ser consolado, como en consolar;
en ser comprendido, como en comprender;
en ser perdonado, como en perdonar;
en ser amado, como en amar…

Pues,
dando es que se recibe,
olvidando se encuentra,
perdonando se es perdonado
y muriendo se nace a la Vida Eterna.

San Francisco de Asís

Deja un comentario