La grandeza del perdón

Una joven de la antigua Yugoslavia fue violada. Se propuso hacer lo imposible para romper la cadena de odio que destruía su país.

«Al hijo que espero -decía-, le enseñaré solamente a amar. Mi hijo, nacido de la violencia, será testigo de que la única grandeza que honra a la persona es la del perdón.»

Sin etiquetas para esta publicación.

Deja un comentario