Mateo Henry, un famoso comentarista, fue asaltado por unos ladrones que le robaron su cartera.
Entonces él escribió lo siguiente en su diario:
«Señor, ayúdame a estar agradecido: primero, porque nunca antes he sido robado; segundo, porque aunque se llevaron la cartera, no me quitaron la vida; tercero, porque aunque se llevaron todo lo que tenía yo, no era mucho; y cuarto, porque fui yo quien fue robado y no quien robó.»
He encontrado en la vida gente que le cuesta ser agradecida y en lugar del agradecimiento su boca está llena de lamento, quejas y sus ojos listos solo para encontrar lo negativo. Agradecimiento es una hermosa joya que nunca debemos perder en el camino. ¿Cuándo fue la última vez que expresó agradecimiento a Dios? ¿Cuándo fue la última vez que fue agradecido con alguien? Pruébelo… la palabra «Gracias» hace que la gente sonría.