A los 4 años: «¡Mi mamá puede hacer cualquier cosa!»
A los 8 años: «¡Mi mamá sabe mucho! ¡Muchísimo!»
A los 12 años: «Mi mamá realmente no lo sabe todo.»
A los 14 años: «Naturalmente, mi madre no tiene ni idea sobre esto.»
A los 16 años: «¿Mi madre? Pero ¿qué sabrá ella?»
A los 18 años: «¿Esa vieja? ¡Pero si se crió con los dinosaurios! «
A los 25 años: «Bueno, puede que mamá sepa algo del tema…»
A los 35 años: «Antes de decidir, me gustaría saber la opinión de mi mamá.»
A los 45 años: «Seguro que mi madre me puede orientar.»
A los 55 años: «¿Qué hubiera hecho mi madre en mi lugar?»
A los 65 años: «¡Ojalá pudiera hablar de esto con mi mamá!»