Lo que no logres hoy,
quizá mañana lo lograrás,
no es tiempo todavía,
nunca en el breve termino de un día
maduran los frutos y la espiga grana.
No son jamás en la labor humana,
vano el afán, ni inútil la porfía,
el que con fe y valor lucha y confía,
los mayores obstáculos allana.
Trabaja y persevera, que en el mundo
nada existe rebelde e infecundo,
para el poder de Dios o el de la idea.
Hasta la estéril y deforme roca
es manantial cuando Moisés la toca,
y estatua cuando Fidias la golpea.
Deja un comentario