El ramo de flores

Un autobús iba traqueteando por un camino de tierra en un pueblo del sur de Estados Unidos. En un asiento iba un anciano delgado que sostenía un ramo de flores recién cortadas. Al otro lado del pasillo estaba una jovencita cuyos ojos volteaban una y otra vez hacia las flores del hombre. Al anciano le llegó el momento de bajar. Impulsivamente puso las flores en el regazo de la joven.

– «Me di cuenta de que te encantaron las flores», explicó, «y creo que a mi esposa le gustaría que tú las tuvieras. Le voy a decir que te las di.»

La joven aceptó las flores, y luego observó al anciano mientras bajaba del autobús y atravesaba la puerta de un pequeño cementerio.

El amor que damos a nuestros semejantes no se compara con el valor material de las cosas.

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