¿Con qué comprar felicidad?

Abrí una cuenta en un banco y la felicidad no me llegó en el extracto mensual.

Con dinero puedo comprar las cosas que quiero, pero las cosas se estropean o, al fin, me cansan, y me deshago de ellas.

Con dinero puedo comprar un colchón blando, pero no la tranquilidad de mi conciencia.

Con el dinero puedo esclavizar a otros, pero, no tengo con qué comprar su corazón.

Con dinero puedo abrir muchas puertas; pero éstas se me cierran cuando ya no puedo ofrecer las monedas.

No pude encontrar la felicidad en el vacío espiritual de creer que la felicidad es comprable.

Construyamos, con amor, un mundo nuevo de profundas satisfacciones espirituales.

Del libro «366 Maravillosas Motivaciones» , de Tiberio López Fernández

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