Acto de Consagración a María Santísima

Virgen Santa, la más pura de todas las vírgenes, y la Madre de mi Dios, María Santísima: Yo, aunque indigno de comparecer ante vuestra presencia soberana, confiando, sin embargo, en vuestra bondad, vengo a arrojarme a vuestros pies, Oh refugio de los pecadores, vengo a ofreceros este corazón mío como trofeo de vuestra misericordia.

Yo os lo presento, miserable como es, por las manos del ángel custodio; yo os lo ofrezco y consagro a vuestro corazón, que es y será siempre el más inflamado del amor divino.

Y para que sus manchas no le hagan repugnante, aceptadlo juntamente con aquellos pobres homenajes, que me esfuerzo en presentaros en este mes consagrado a Vuestra Gloria; Ah, no desechéis esta oferta.

Que él sea todo vuestro, todo de vuestro Jesús: otra cosa no deseo, ni en vida ni en muerte; inspiradle Vos, Oh María, una viva fe, una firme esperanza y, una ardiente caridad, a fin de que viva sólo de Dios en esta vida y en toda la eternidad. Así sea.

Súplicas:

Madre pura de Dios mi salvador, ruega por este pobre pecador. Ave María.

Acueducto de gracias que dan vida, hazme llorar mis culpas sin medida. Ave María.

Reina del cielo y del mortal Señora, sé mi amparo y defensa a cada hora. Ave María.

Ínclita hija de Joaquín y Ana, dame de Dios la gracia soberana. Ave María.

Abogada del triste y sin consuelo, por ti la gloria alcance yo del cielo. Ave María.

Madre de Dios y Madre nuestra, ruega por nosotros, ruega por nuestra salvación. Te agradecemos infinitamente, porque con tu intercesión y protegidos bajo tu manto, podremos disfrutar de las Gracias de Dios, en la vida eterna.

Amén.

Deja un comentario