Con amor todo es posible

Hace años, un estudioso de la energía y las plantas llamado Luther Burbank logró cosas asombrosas con unos cactus. Como buen enamorado de la naturaleza dedicaba buen tiempo a hablar con esas plantas y les decía: «No tienen nada qué temer, las espinas no les hacen falta porque yo siempre las voy a proteger.»

Además, las trataba con cariño, las cuidaba y siempre les enviaba toda su energía amorosa. Pues bien, aunque algunos no lo crean, Luther Burbank logró algo que en realidad parece inverosímil: Con el tiempo, esos cactus tuvieron unos brotes que dieron origen a una variedad sin espinas. De hecho, Burbank se hizo famoso hace años con sus curiosos experimentos sobre la sensibilidad de las plantas.

Y hablo de esto sólo para sembrar una inquietud: ¿qué no podrás lograr contigo y los que amas si de verdad lo quieres e insistes?

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